Es difícil decir lo que uno siente cuando habla de Xabi Orozko. No hablo solo como jugador de waterpolo o como buena persona que puede ser, sino lo que puede llegar a representar para un club. Cuando un niño te pide el gorro número 12 no lo hace porque es su número preferido, lo hace porque es el número de que lleva él, Xabi Orozko. >> Seguir leyendo